Vivir siendo celiaco

  La Enfermedad Celiaca es la incapacidad de digerir el gluten, un componente natural presente en el centeno, trigo, cebada y probablemente en la avena. Los síntomas más comunes son la distensión abdominal y la diarrea. La enfermedad es inicialmente diagnosticada con una dieta de exclusión, es decir, unos meses sin comer estos cereales seguido por la reintroducción de estos alimentos uno por uno.

   En la población, la frecuencia de la Enfermedad Celiaca es de 1 en cada 2.000 nacimientos, es decir, un 0,05%. Sin embargo, muchos estudios confirman la alta prevalencia de la Enfermedad Celíaca en niños con Síndrome de Down. La incidencia es de 1 en cada 14 nacimientos, o sea, un 7%.

   La dificultad en la identificación de las manifestaciones clínicas puede conducir a un diagnóstico tardío de la enfermedad y por lo tanto el retraso en el inicio del tratamiento. La falta de tratamiento causa impactos, a largo plazo, permanentes de crecimiento y desarrollo; defectos en la formación dental, osteoporosis, aumento del riesgo de tumores malignos, causando daños en el desarrollo escolar y profesional de estas personas.

   Un niño con síndrome de Down, naturalmente, ya está expuesto a riesgos de crecimiento y desarrollo, debido a las características metabólicas del síndrome, y se considera uno de los mayores grupos de riesgo de la Enfermedad Celíaca. Teniendo en cuenta la alta prevalencia y la gravedad de las consecuencias que la Enfermedad Celíaca no diagnosticada, por lo tanto sin tratamiento, puede generar, es esencial la actualización de los profesionales de la salud acerca de los conocimientos científicos existentes a día de hoy, con el objetivo de conseguir un mejor tratamiento de este colectivo.

Algunos consejos para celiacos

·         Bebidas derivadas de la cebada, como las bebidas elaboradas con malta o extracto de malta, están contraindicadas.

·         En los restaurantes y bares asegúrate que el aceite usado para freír no ha sido utilizado para otros fines. A menudo utilizan el mismo aceite para freír aperitivos, alimentos rebozados con harinas, y por lo tanto el aceite se contamina con gluten;

·         Nunca compre galletas, harinas, almidón de maíz, pan de maíz, en panaderías que también hacen pan de trigo. Es imposible evitar la contaminación, porque el trigo es un polvo muy fino que se queda suspendido en el aire en pequeñas cantidades, pero suficiente para hacer daño a los celíacos;

·         Cuidado con guisos de todo tipo. Muchas personas usan harinas para espesarlos.

·         Tenga cuidado con la harina de maíz. Algunos  molinos de maíz también trabajan con el trigo. Es importante hablar con el fabricante;

·         La soja está permitida en la dieta de un paciente celíaco, pero debes prestar atención a la composición de los ingredientes, para evitar confusiones. Si el producto contiene extracto o concentrado de soja, proteína aislada de la soja, proteína de soja texturizada, se puede utilizar. Pero si hay proteína vegetal hidrolizada, no puede ser consumida, ya que pueden contener trigo, cebada, centeno o avena en su composición;

·         Lo mismo ocurre con el caso de almidón, fécula o almidón modificado, que no se especifica si tienen o no trigo. Consulta al fabricante para obtener más información acerca de los ingredientes del producto. Por supuesto, en cuanto al almidón de maíz, patata o yuca, estos pueden ser consumidos;

·         La maltodextrina derivada del almidón de maíz, glucosa, semillas de sésamo, levadura de cerveza o el glutamato pueden ser consumidos porque no tienen nada que ver con la malta o el gluten;

·         En los restaurantes, un gran número de cocineros, que no saben lo que es la Enfermedad Celíaca, a veces acompañan las carnes con cerveza antes de ponerla a cocer en el horno. Infórmate directamente con el cocinero.

·         Utiliza utensilios bien limpios y no los compartas con preparaciones con gluten.

El tratamiento de la Enfermedad Celíaca consiste en el seguimiento de una dieta estricta sin gluten durante toda la vida. El celíaco debe basar su dieta en alimentos naturales como legumbres, carnes, pescados, huevos, frutas, verduras, hortalizas y cereales sin gluten (arroz y maíz). Deben evitarse, en la medida de lo posible, los alimentos elaborados y/o envasados, ya que en estos es más difícil garantizar la ausencia de gluten.

Según datos de la Federación de Celiacos, aproximadamente el 80% de los alimentos procesados en la Unión Europea tienen gluten. Alimentos tan distintos como embutidos, helados, yogures, chocolates o golosinas pueden contener cantidades variables de esta proteína, ya sea porque se incluye este elemento en su composición o bien porque se hayan contaminado en el proceso de elaboración.

Leer bien las etiquetas de los alimentos y hablar con el fabricante son actitudes fundamentales para estar seguro a la hora de consumir productos por los celiacos.

Para saber mas http://www.celiacos.org/