La dieta del Diabético

Los mitos sobre la alimentación del diabético son incontables. Dicen que no pueden comer hidratos de carbono o ningún tipo de azúcar y hasta dejar totalmente la carne roja

La dieta ideal varia para cada persona diabética. Un plan alimentario completo solo puede ser ofrecido por un profesional calificado, que tendrá en cuenta las glucemias diarias, el colesterol, el peso, la actividad física y sus preferencias alimentarias. Sin embargo, algunas recomendaciones son iguales para todos, incluso para no diabéticos, como hacer tres grandes comidas al día (desayuno, comida y cena) y dos pequeñas meriendas (media mañana y merienda de la tarde), además de optar por algunos alimentos en detrimento de otros.

Abajo algunos cuidados importantes:

Arroz, panes y pastas integrales: los hidratos de carbono complejos en esos alimentos son digeridos más lentamente por el organismo, liberando la glucosa en pequeñas dosis. Eso es beneficioso para el diabético que no tendrá picos en su glucemia o subidas rápidas de la glucosa, cuando comen esos alimentos integrales. Los alimentos integrales son ricos en fibras y mejoran la acción de la insulina

Hidratos de carbono simples y azúcar: dulces, panes, masas y pastas no necesitan ser abolidos completamente de la dieta del diabético. Sin embargo, es necesario estar atento a las cantidades.

Los dulces pueden ser consumidos esporádicamente, prestando atención a principios rigurosos de cantidad y frecuencia y acompañados de una compensación de hidratos de carbono. En general una dieta para diabéticos debe ser constituida de 50% de hidratos.

Por eso, cuando el portador de diabetes quiere comer un dulce, debe reducir el consumo de otras formas de hidratos para así mantener un equilibrio. En el caso de diabéticos insulino dependientes, la dosis de insulina debe ser ajustada para aquella comida.

Atención a las frutas: las frutas muchas veces son una trampa en la dieta de los diabéticos. Es muy común la persona pensar que puede consumir frutas a su voluntad por ser un alimento saludable.

Es importante entender que todas las frutas poseen hidratos de carbono simples, como la glucosa, pero que por cuenta de las fibras presentes en las frutas pueden ser consumidas en cantidades mayores que otros hidratos simples.

La recomendación para los diabéticos es la ingesta de máximo tres piezas de frutas al día, y siempre optando por las menos calóricas. En las personas obesas ellas pueden suponer un sobrepeso y en diabéticos insulino dependientes una subida en la glucemia.

Zumos: a pesar de muy saludables, los zumos generalmente contienen las tres porciones de fruta que el diabético tiene derecho durante el día. Un buen ejemplo es el zumo de naranja: un baso tiene las mismas calorías que un bombón y tiene glucosa suficiente para elevar mucho la glucemia del diabético.

 La recomendación es que las frutas sean consumidas al natural, de preferencia en la media mañana o merienda.

 Leche descremada: para reducir el consumo de grasa, la recomendación es cambiar la leche entera por descremada o semi descremada y preferir derivados mas magros. No caigas en el cuento de que las versiones mas ligeras de la leche tienen menos calcio que la leche entera, en realidad tu estarás consumiendo menos grasa sin perdida de los beneficios.

Cortes magros de carne roja: la mayor riqueza de las carnes rojas son sus micronutrientes, como el hierro y la vitamina B12, ya que las proteínas pueden ser halladas en las carnes blancas y vegetales. Por eso, la carne roja debe ser consumida, pero evitando siempre las que tienen mas grasa, además, ellas deben ser consumidas de 2 a 3 veces a la semana máximo.

Pescados: son muy indicados a todas las personas. Los mejores son los ricos en Omega 3 como la trucha, salmón y sardina. A pesar de muy saludables, tienen mucha grasa y deben ser consumidos en porciones pequeñas y controladas. El preparo no debe ser frito ni rebosado, dando preferencia a los guisos, asados o la plancha